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La creencia popular nos dice que Isaac Newton estaba relajado y descansando bajo la sombra de un manzano, cuando una de sus frutas le cayó en la cabeza y ahí surgió la primera idea sobre la teoría de la ley de la gravedad.

Si la historia es cierta o simplemente era más bonito contarlo así, nunca lo sabremos, este relato nos ha llegado del libro ‘La vida de Sir Isaac Newton’ de William Stukeley, 1752.

Pero, ¿por qué esta historia nos puede ayudar a entender uno de los conceptos más fundamentales del taoísmo?

La importancia de la no-acción

En un mundo cada vez más agitado, la verdadera revolución reside en parar, contemplar y relajarse.

Uno de los conceptos claves del taoísmo es el wu wei, traducido como no-acción, sin embargo, no hay que entender esta ‘no-acción’ con ser perezoso o no hacer nada, hay que entenderla más bien como acción espontánea o sin esfuerzo.

La creatividad y la innovación es algo crucial para el ser humano, nos ha hecho avanzar como civilización. Grandes mentes han tenido fantásticas ideas para que evolucionáramos en diferentes campos y, como le ocurrió a Isaac Newton, esos momentos de lucidez vinieron desde un estado de calma y serenidad. 

El descanso puede llevar a la creatividad

Cuando somos capaces de relajarnos, ya sea meditando, dando un paseo, incluso duchándonos, permitimos que nuestra mente se vacíe, los pensamientos divagan libremente y es ahí donde pueden brotar las mejores ideas.

Si en algún momento nos sentimos bloqueados con alguna tarea, hay ideas con nuestros proyectos que no salen, es posible que lo único que tengamos que hacer es dejarlo ir y confiar en que encontraremos la respuesta de forma espontánea.

La verdadera innovación proviene de una mente clara y serena, no de una que está agitada y llena de ruido. Al permitirnos estar relajados y poder descansar, se pueden abrir nuevas perspectivas y percepciones que no hubiéramos pensado antes.

Por supuesto, este no es el único significado que hay detrás del concepto wu wei, es mucho más rico y complejo, pero no te preocupes, lo iremos desgranando poco a poco en siguientes emails.

El camino para hacer, es no hacer.

Zhuangzi. Filósofo, escritor y poeta. Siglo IV a. C.

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